Una buena cantidad de tinta
no es un ataque personal,
ni una forma de guerra,
ni un te-odio líquido...
Tras una buena cantidad de tinta
no cabe el estatismo ni la espera,
no se escruta, agazapado en la nube negra, su resultado,
no se deja flotando un lo-siento que se escapa...
Después de una buena cantidad de tinta,
inmediatamente después,
sólo queda una cosa: la huida.
.
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3 comentarios:
No me gustan ni que sólo quede una cosa, ni las huídas.
Así que ve buscando otra solución.
pensaré de aquí al sábado
ais...
otro día ;)
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